Un factor fundamental en el envejecimiento de la piel es la exposición acumulativa a la luz solar. Los signos clínicos de fotoenvejecimiento cutáneo son: arrugas, lentigos, queratosis, telangiectasias, pérdida de humedad, elasticidad y tono de la piel.

Al avanzar el proceso de fotoenvejecimiento, el colágeno y las fibras elásticas experimentan mayores daños, manifestándose como arrugas finas o gruesas y manchas en áreas fotoexpuestas ( cara, escote y extremidades).

En SKINLASER ofrecemos evaluación dermatológica especializada y terapia individualizadas a través de procedimientos como. Los tres métodos fundamentales de rejuvenecimiento cutáneo son la peeling químico, peeling mecánico o dermoabrasión, crioterapia, Láseres ablativos y no ablativos. Estos tratamientos aplicados en nuestro centro dermatológico han demostrado ser seguros y eficaces.

Las técnicas de rejuvenecimiento son parte de un programa global de cuidados cutáneos que debe incluir la aplicación de medidas fotoprotectoras y el uso de productos médicos y/o cosmecéuticos tópicos.  Todas las técnicas buscan estimular la producción de colágeno, la regeneración de la piel, con la mejora de la calidad y el aspecto.

Las técnicas de rejuvenecimiento son una parte muy gratificante de la práctica de la dermatología, tanto para el paciente como para el especialista

El uso de fotoprotectores es el principal factor para prevenir el fotoenvejecimiento y el cáncer cutáneo.  Los principios protectores solares son: químicos y físicos; que actúan absorbiendo y dispersando la radiación UV. No olvidar que el uso de sombreros y ropas adecuadas también favorecen una buena fotoproteccion.

El daño solar es acumulativo e irreversible.

Evitar la exposición solar en horarios entre las 10 y las 15hs es parte de las medidas preventivas del fotodaño.  Los protectores solares se pueden empezar a usar en niños mayores de 6 meses

La toxina botulínica es una proteína purificada y su aplicación en áreas específicas como la región frontal, periocular, cuello entre otras, tiene como objetivo reducir la contracción muscular. 

Su mayor efecto es sobre arrugas móviles, las que aparecen con el movimiento muscular y se usa como prevención en la formación de arrugas de expresión. Tiene menor efecto sobre la arruga estática, la que permanecen en posición de relajación de los músculos faciales pero ayuda a disminuir este tipo de arrugas.

Es una herramienta importante para combinar con otras terapias en el manejo del rejuvenecimiento.

En el rostro es un procedimiento simple y con poca molestia. Se usa frio local en el lugar de la aplicación para mejorar el confort del paciente.

También se usa en otras patologías como sudoración axilar o palmoplantar, Rosácea. En palmas y plantas puede incomodar y se podría utilizar anestesia local.

Se recomienda el uso cada 4 a 6 meses para evitar resistencia al producto por aplicaciones frecuentes.

El envejecimiento cutáneo lleva a la pérdida del colágeno de la piel y de volumen por reabsorción ósea y de la grasa facial.

El ácido hialurónico utilizado en procedimientos estéticos es compatible con el ácido hialurónico humano con mínimo riesgo de reacción alérgica.

La aplicación de ácido hialuronato en ciertas áreas del rostro, permite reponer parte de estas pedidas brindando soporte a los tejidos, reubicando de estructuras,  mejorando el contorno facial, reduciendo las arrugas, las líneas de expresión, suavizar surcos, definir rasgos y aumentar volumen como en labios y ojeras.

Existen diferentes tipos de ácido hialurónico que estarán indicados dependiendo del área a tratar y lo que se quiera lograr.

Es importante la armonización utilizando la cantidad de producto sin exceder volúmenes que no permitan un efecto natural.

En general no hay efectos post aplicación.

Es importante saber que el ácido hialurónico es un producto reabsorbible y tiene un efecto promedio de 6 a 12 meses.

Con la edad se empieza a perder colágeno, elastina y ácido hialuronato componentes estructurales de la piel, manifestándose con pérdida de la hidratación y la elasticidad cutánea. 

El colágeno es una de las principales proteínas que sustenta, sostienen y hacen que nuestra piel brille. 

Los bioestimuladores son terapias enfocadas en restaurar la producción de colágeno que perdemos con la edad, estimulando la producción de nuestro propio colágeno, devolviendo firmeza, elasticidad, tonicidad y brillo de la piel, dando un aspecto de piel joven y natural, sin voluminizar, ni cambiar los rasgos.

Son completamente reabsorbidos por el organismo. Algunos proporcionan un efecto sutil al rellenar las áreas afectadas.

Se puede aplicar en rostro, cuello, escote, manos, brazos, glúteos, tronco y muslos

La aplicación es a través de microinyecciones con aguja o a través de cánulas, utilizando anestesia tópica o local y fuentes de frio para mejorar el confort del paciente durante el procedimiento.

El efecto no es inmediato porque se requiere un estímulo para la producción de colágeno que es el principal objetivo, lo cual se puede apreciar a partir de la tercera semana después de la aplicación del producto.

Existen múltiples productos utilizados con diferentes componentes como son: de ácido hialurónico (skinbooster), el ácido poli-L-láctico (Sculptra), hidroxiapatita cálcica (Radiesse), Ellansé, el plasma rico en plaquetas entre otros.

Las aplicaciones son cada dos o cuatro semanas durante tres sesiones y otros productos se aplican cada año o cada cuatro años.

El peeling químico es un tratamiento estético que consiste en aplicar sobre la piel productos para eliminar sus diferentes capas, promoviendo la renovación celular y la regeneración de nueva piel.  Su efecto conlleva a mejor el aspecto, el brillo y la textura de la piel.

Esta indicado en diferentes procesos como son mejorar las arrugas finas, acné, cicatrices de acné, estrías, fotodaño, melasma entre otros.

El efecto puede ser sobre la capa más superficial o profunda de la piel y va a depender del tipo de producto y el objetivo del tratamiento. Esto permite clasificar los peelings en superficiales, medios y profundos.

Después de la aplicación puede haber una descamación fina de la piel los más superficiales y los medios o profundos pueden producir costras. La frecuencia para realizar el procedimiento depende del tipo de peeling. Los más superficiales se pueden realizar cada 2 a 4 semanas.

Como cuidados posteriores a el procedimiento es necesario evitar la exposición solar, requiere el uso continuo del protector solar e hidratar la piel. 

Las cicatrices son el resultado de la reparación de la piel después de haber sido sometida a una injuria de diferente origen como son: infecciones, cirugías, heridas traumáticas, quemaduras, lesiones o algún tipo de inflamación del tejido.
Los tipos de cicatrices más comunes son: las cicatrices atróficas, cicatrices hipertróficas, cicatrices queloides, cicatrices de acné y las estrías.

Debemos considerar la importancia de tratar las cicatrices por el efecto que tienen en la autoestima y las relaciones interpersonales.

Es importante saber que la cicatriz nunca tendrá el mismo aspecto que un tejido sano, por lo tanto, los tratamiento no harán que estas desaparezcan. El principal objetivo es mejorar su apariencia, haciéndolas lo más discreta e imperceptible posible.

Las opciones de tratamiento son diferentes como el uso de cremas, láminas de silicona, aplicación de peeling, infiltración de corticoide, aplicación de nitrógeno líquido, enzimas recombinantes, rellenos con ácido hialurónico, subcisión, dermoabrasión, resección y el uso de tecnología Láser, que sin dudar alguna es una de las mejores opciones.

Siempre combinar terapias, favorece una mejor respuesta.